El acceso a la universidad

La PAU, que demuestra los conocimientos adquiridos, está formada por dos fases: la general obligatoria y la específica voluntaria .

Una vez acabado el bachillerato y obtenido el título, el siguiente paso para poder acceder a la universidad es superar la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU). Los objetivos de esta prueba son demostrar que se han adquirido los conocimientos y la madurez necesaria para poder acceder a los estudios universitarios. Además, es una oportunidad de mejorar la nota media para la carrera que se quiera realizar, gracias a la fase específica voluntaria, donde se tiene la posibilidad de examinarse de contenidos relacionados con el grado al que se quiere acceder.

Pero, ¿en qué consisten las pruebas? La PAU está formada por dos fases: la fase general obligatoria y la fase específica voluntaria. En cada fase, los alumnos se examinan de materias dadas durante bachillerato. En cada ejercicio, a su vez, hay dos opciones de entre las cuales el alumno elige una. Cada prueba tiene una duración de hora y media con un intervalo/descanso entre exámenes de cuarenta y cinco minutos.

La fase general consta de cuatro exámenes. (cinco si es comunidad autónoma con lengua oficial). En la actualidad, las materias de los exámenes son las siguientes:

  • Lengua castellana y literatura.
  • Lengua extranjera a elección del alumno: alemán, francés, inglés, italiano o portugués.
  • Historia o Filosofía, a elección del alumno.
  • Una materia de modalidad de bachillerato.

Para aprobar, el primer requisito es que en esta fase hayas obtenido un mínimo de cuatro puntos sobre diez. Una vez cumplido esto, se hace la media ponderada entre la nota media de bachillerato (60 %) y la calificación de esta fase general (40 %). Si el resultado es mayor de un cinco, se considera aprobada y esta calificación tiene una validez indefinida.

En la fase específica voluntaria se pueden realizar hasta un máximo de cuatro ejercicios a elección del alumno (excepto los estudiantes de Cataluña, que se pueden presentar a un máximo de 3 asignaturas), pero solo contarán las notas de dos materias relacionadas con la rama del conocimiento de la titulación a la que desea acceder. Las notas de estos exámenes pueden incrementar la calificación hasta un 10 %, pero las calificaciones caducan a los dos años.

La realización de esta fase es un buen método para aumentar la nota media, ya que puede llegar a subir hasta cuatro puntos, si las universidades han considerado las materias examinadas prioritarias; si no es así, la nota media puede subir hasta dos puntos. Por ello, recomendamos una correcta preparación de las asignaturas relacionadas con la carrera que se quiere realizar y presentarse a esta fase.

Además, la fase específica también está disponible para los alumnos que quieren acceder a la universidad desde otros estudios superiores como la formación profesional o las enseñanzas deportivas.

Convocatorias
Se celebrarán, al menos, dos convocatorias anuales. Los estudiantes podrán presentarse en sucesivas convocatorias para mejorar la calificación tanto de la Fase General como de la Específica. La nota de la Fase General tendrá validez indefinida. La de la Fase Específica 2 cursos.

Como consejo final, recordamos que cumpliendo con una buena planificación de estudios desde el bachillerato y manteniendo una actitud relajada y positiva se puede superar con muy buenos resultados esta prueba, así como las específicas de las universidades.