¿Qué periodista necesita la era digital?

¿Qué periodista necesita la era digital?

El entorno digital proporciona gran diversidad de medios de expresión y multiplica los canales y las audiencias, lo que se traduce en nuevas oportunidades para periodistas capaces de conectar con los intereses del público

A comienzos de siglo, ante la popularización de Internet, fraguó la idea de que estábamos en ciernes de la construcción de una sociedad ideal en términos democráticos. La libre circulación de mensajes, ideas y pensamientos permitiría que la opinión pública se expresase de forma pura e incondicionada, sin necesidad de la intermediación de ningún agente. En este idílico escenario comunicativo, los medios y el Periodismo se contemplaban como algo prescindible.

Dos décadas después, la realidad ha demostrado la inconsistencia de este ideal. Internet ha puesto mucha información a disposición del público, es cierto. Pero también es innegable que la sociedad digital ha dispuesto el escenario propicio no sólo a la proliferación de informaciones de peor calidad sino también a la difusión de noticias falsas o manipuladas. En este contexto puede afirmarse que los periodistas son más necesarios que nunca.

Aunque resulte paradójico, es una urgencia contemporánea que el Periodismo se reencuentre con los fundamentos clásicos del oficio, aquellos que ya señalaba Pulitzer: “El Periodismo mantiene a los dirigentes en el que es su deber. Desvela los secretos intentos de robo. Promociona todos los planes de progreso que resultan esperanzadores. Sin él, la opinión pública no tendría forma y sería muda”.

Sin embargo, no todo en la digitalización representa una amenaza que combatir en términos informativos. El entorno digital proporciona gran diversidad de medios de expresión y multiplica los canales y las audiencias, lo que se traduce en nuevas oportunidades para periodistas capaces de conectar con los intereses del público. Además, la tecnología digital ha puesto en manos del periodista una fuente informativa de primer orden: el Big Data. Del análisis e interpretación de la gran cantidad disponible puede surgir material informativo de gran valor.

En definitiva, para ejercer el Periodismo hoy se necesita un conocimiento de la nuevas técnicas y tecnologías de la información, en permanente evolución y, además, un compromiso vocacional. Un compromiso que se traduce en una actitud, una disposición personal resumida en los siguientes puntos:

1. Ser realista, no añadir ni quitar nada por cuenta propia. Hay que verificar cada información antes de escribir.

2. Las noticias están esperando a ser contadas. Hay que prestar atención a lo que sucede cerca, donde se puede encontrar muchas cosas interesantes de las que informar. Buscar lo noticiable en la vida diaria.

3. Escribir desde el punto de vista propio. Ese ángulo personal, esa perspectiva, es con lo que se consigue la diferencia.

4. No maquillar ni manipular las noticias, mejor dejar la imaginación para otros menesteres. A nadie le gustan las mentiras y el público no las perdona.

5. Una descripción simple siempre es mejor que una exageración.

6. Ser preciso. No existe más información que la información exacta. La gente confía en lo que se cuenta, no esperan ser defraudados.

7. Es difícil que la gente entienda de qué estás hablando si no se escribe correctamente.

8. Leer mucho y expandir el vocabulario, una historia corta no será tan emocionante si repite palabras en cada línea.

9. Es necesario cuidar a las fuentes.

10. Llevar siempre un cuaderno, un portátil, un móvil, una cámara… Nunca se sabe cuándo puede suceder algo interesante.


¿Sabrías pensar en clave de Marketing?

¿Sabrías pensar en clave de Marketing?

Pocas actividades como el marketing aportan una visión tan amplia del conjunto de valores de una organización

La onda expansiva del Marketing es un fenómeno bien visible dentro de las empresas. La visión omnicomprensiva del profesional del marketing, su capacidad para entender todas las partes de la organización como parte de un plan global es cada vez más apreciada.

El factor digital ha añadido en los últimos tiempos un elemento que ha marcado un cambio decisivo para la toma de decisiones de los departamentos de Marketing: el Big Data. El Marketing es, en definitiva, elegir en clave estructural, apostar por una línea que involucrará a todos los procesos de la organización. Saber leer e interpretar el Big Data es una ventaja sustancial para optar por el camino adecuado.

Por otro lado, si el marketing es un aspecto estratégico dentro de la organización, es clave que el profesional sea una persona capaz de responder al reto, por formación, actitud y aptitud. Pocas actividades como el marketing aportan una visión tan amplia del conjunto de valores de una organización, y la persona que se dedique a ello tiene que presentar un perfil acorde a esta diversidad de enfoques. ¿Qué cualidades personales hay que tener para poder atender a esta visión de 360º?

Debe tener facilidad para comprender la función social de la empresa, el análisis de problemas, su diagnóstico y la proposición de soluciones, capacidad analítica, de síntesis y de relación con el grupo, facilidad de comprensión y de abstracción, creatividad, facilidad de expresión, sociabilidad, con amplia visión del mundo y perspectiva sobre su posible evolución.

Sentir pasión por lo que hace, cuanta más pasión, más productividad y mejores resultados. Tener la capacidad de ver más allá, crear sueños, ilusionar y emocionar.

Saber escuchar a la gente de alrededor y sobre todo a la gente de fuera, escuchar a clientes, a colaboradores, etc. es una buena forma para comprender el mercado y conocer sus necesidades.

El marketing, y más con la vertiente digital, está en un constante proceso de actualización y para estar al tanto de todas las novedades y no quedarse obsoleto, la formación es fundamental. Hay que tratar de diferenciarse lo máximo posible. Siempre queriendo aprender cosas nuevas, nuevos medios, tecnologías y soportes. Esto requiere muchas más horas de trabajo, pero merece la pena. La marca personal es muy importante.

Además se tiene que tener un perfil financiero, pendiente del ROI y del valor de negocio de su cartera de productos.

ser capaz de salir de la zona cómoda y pensar diariamente qué puede hacer para superar las expectativas de sus clientes y cómo puede sorprenderles. Y descubrir nuevas vías de comercialización, explorar nuevos mundos y por supuesto utilizar la creatividad en toda su amplitud y áreas.