¿Por qué se estudian los postgrados?

Permiten continuar la formación y especializarse para la práctica profesional
Los postgrados permiten continuar la formación y especializarse para la práctica profesional.

Los títulos de Postgrado Oficial se dividen en estudios de 2º Ciclo y estudios de 3er Ciclo. En el 2º Ciclo se cursan Másteres Universitarios de uno o dos años de duración (entre 60 a 120 créditos europeos) y en el 3er Ciclo el Doctorado.

Hay dos tipos de Másteres Universitarios:

  • Profesionales, orientados a la capacitación para la práctica profesional. En este tipo de másteres suele ser habitual la inclusión de prácticas profesionales en empresas. Dentro de estos másteres se encuadran los másteres que capacitan para profesiones reguladas.
  • De investigación, orientados a la capacitación en la actividad de investigación.

Los Másteres Universitarios permiten continuar la formación y especializarse en lo que las empresas demandan a día de hoy, con un título oficial que es válido en cualquier país europeo.

La demanda del mercado laboral y una mejora salarial es lo que impulsa al 60% de los estudiantes a la hora de realizar un máster o postgrado. Ello es lo que ha concluido el estudio realizado por Universia y el portal trabajo.com, que han recogido las opiniones de 5.135 encuestados de todo el territorio iberoamericano (Argentina, Brasil, Colombia, España, Méjico, Perú, Portugal, Puerto Rico, Uruguay y Chile).

Sin embargo, no es solo la retribución y las exigencias del mercado de trabajo las que marcan el camino. El estudiante también apuesta tanto por el reconocimiento personal, como por la contribución que realizará a la sociedad. Es interesante ver como al fin y al cabo, es importante medir y situarnos en el presente que nos rodea, aunque dirigiendo la vista hacia el futuro y con el propósito de crecer y aportar a los demás.

A parte de estos datos, que son los más relevantes, también señalan como un gran número de encuestados buscan la información sobre los diferentes postgrados que se ofertan en las páginas web de las distintas universidades. Del mismo modo, los encuestados manifiestan que quieren continuar con sus estudios en universidades distintas a la universidad de origen o primera universidad.

Es claro que si la elección del máster o postgrado es la correcta, el estudiante desarrollará más competencias tanto a nivel técnico como personal. Desde el inicio del Plan Bolonia, la regulación de los nuevos llamados grados, iniciaron la transformación de los másteres y postgrados y actualmente, son casi precisos para complementar los estudios de grado y especializarse en un ámbito en concreto.

Los empleadores también opinan al respecto y es que pese a que todavía no hayan publicado datos específicos sobre los estudios recientes de máster, la Agencia per a la Qualitat del Sistema Universitari de Catalunya (AQU), contempla que los empresarios buscan en sus candidatos que hayan tenido experiencia internacional, largos periodos de prácticas y que la universidad en la cual lo realicen, sea de prestigio.

La EAE Business School, ha presentado apenas hace unas semanas el estudio “La Empleabilidad de la Población Cualificada 2014”. Y la realidad es que los estudiantes de postgrado poseen un 58% más de posibilidades de encontrar trabajo que los que solo tienen un graduado universitario. En el conjunto de la población activa, este sector estaría un 200% por delante.

Patricia Boquete.
Técnica en Orientación Profesional Universitat Abat Oliba CEU.


Los nuevos perfiles profesionales en la era 2.0

Con los avances tecnológicos están surgiendo nuevos puestos de trabajo multidisciplinarios que las empresas necesitan cubrir.

Hoy día, la sociedad vive un continuo cambio provocado por diversos factores: la globalización de los mercados, la desaparición de fronteras, los movimientos migratorios, la revolución tecnológica o la propia evolución de la sociedad que conducen a los individuos a un nuevo paradigma. Mientras desaparecen empleos tradicionales, también surgen nuevas profesiones.

La productividad de las empresas se mantiene en ascenso, mientras la creación de empleo continua desplomándose. Este patrón se vive en la mayor parte de países desarrollados como una contradicción que responde a dos factores: la evolución de los modelos productivos y la automatización de un gran número de profesiones tradicionales.

Uno de los elementos claves que influyen en este vertiginoso proceso de transformación ha sido el desarrollo y uso masivo de las tecnologías emergentes. Estas herramientas están produciendo un continuo intercambio de información y experiencias en webs, foros o redes sociales que genera un valor intangible para los individuos.

La implantación de las nuevas tecnologías, al contrario de lo que pueda parecer, no destruye empleo, sino que lo transforma. De igual forma que en el pasado la mano de obra emigró masivamente del campo a las fábricas, el progreso está sustituyendo profesiones que históricamente parecían inmutables pero que, probablemente, acabarán por convertirse en un fenómeno minoritario y residual.

A partir de estos cambios, vinculados a los avances tecnológicos, están surgiendo nuevos perfiles profesionales que las empresas comienzan a demandar. Aunque se trata de empleos de carácter eminentemente técnico, el futuro de la tecnología es multidisciplinar. También se nutrirá de disciplinas vinculadas a otras ramas del saber, como las Humanidades, las Ciencias Sociales o las Bellas Artes. La diferencia es que los profesionales vinculados a ellas deberán adquirir nuevas habilidades para poder acceder a estos yacimientos que ofrecen nuevas oportunidades de empleabilidad y que dan respuesta a las nuevas necesidades surgidas en la sociedad del conocimiento y de la información. De entre ellas, cabe destacar:

  • Diseñador de contenidos web.
  • Programador de aplicaciones para móvil.
  • Gestor de robots.
  • Diseñador de “nubes”.
  • Analistas y auditores de seguridad informática.
  • Ingeniero de objetos inteligentes.
  • Community Manager. Gestor de comunidades virtuales de las organizaciones.
  • Experto SEO (Search Engine Optimization) y SEM (Search Engine Marketing).
  • Responsable de e-Commerce para gestionar el comercio online.
  • Consultor de e-Business.
  • Profesional de la asistencia integral a la tercera edad.
  • Ingeniero de vehículos orientados a la sostenibilidad del medio ambiente.
  • Ingeniero de eficiencia energética.
  • Expertos de seguridad en Cloud Computing.
  • Desarrollador de animación en 3D y de videojuegos.

Los perfiles profesionales emergentes también provienen de sectores donde se esperan grandes avances, como el turismo cultural, la biomedicina, la ingeniería genética, la biotecnología, la robótica, la agricultura biológica o el sector aeronáutico. Por último, existe la necesidad de generar perfiles con vocación emprendedora, y facilitar el autoempleo de cara a configurar una comunidad empresarial competitiva. Ello no sólo depende de políticas, sino también de fomentar el espíritu emprendedor en todas las fases de aprendizaje.

José Luis del Olmo Arriaga
Director del Observatorio de la Demanda Universitaria. Director de Postgrado y Extensión Universitaria. Universitat Abat Oliba CEU


Els nous perfils professionals a l’era 2.0

Amb els avenços tecnològics estan sorgint nous llocs de treball multidisciplinaris que les empreses necessiten cobrir.

Avui dia, la societat viu un continu canvi provocat per diversos factors: la globalització dels mercats, la desaparició de fronteres, els moviments migratoris, la revolució tecnològica o la evolució mateixa de la societat que condueix als individus cap a un nou paradigma. Mentre desapareixen llocs de treball tradicionals, també sorgeixen noves professions.

La productivitat de les empreses es manté en ascens, mentre la creació de feina continua desplomant-se. Aquest patró es viu en gran part de països desenvolupats com una contradicció que respon a dos factors: l’evolució dels models productius i l’automatització d’un gran nombre de professions tradicionals.

Un dels elements clau que influeixen en aquest vertiginós procés de transformació ha sigut el desenvolupament i ús massiu de les tecnologies emergents. Aquestes eines estan produint un intercanvi d’informació i experiències continu a webs, fòrums o xarxes socials que genera un valor intangible pels individus.

La implantació de les noves tecnologies, al contrari d’allò que pugui semblar, no destrueix llocs de treball, sinó que els transforma. De la mateixa manera que al passat la mà d’obra va emigrar massivament del camp a les fàbriques, el progrés està substituint professions que històricament semblaven immutables però que, probablement, acabaran per convertir-se en un fenomen minoritari i residual.

A partir d’aquests canvis, vinculats als avenços tecnològics, estan sorgint nous perfils professionals que les empreses comencen a demanar. Tot i que es tracta de feines de caràcter eminentment tècnic, el futur de la tecnologia és multidisciplinari. També es nodrirà de disciplines vinculades a altres branques del saber, com les Humanitats, les Ciències Socials o les Belles Arts. La diferència és que els professionals vinculats a elles hauran d’adquirir noves habilitats per a poder accedir a aquests jaciments que ofereixen noves oportunitats d’ocupabilitat i que donen resposta a les noves necessitats sorgides a la societat del coneixement i de la informació. D’entre elles, destaquen:

  • Dissenyador de continguts web
  • Programador d’aplicacions per mòbils
  • Gestor de robots
  • Dissenyador de “núvols”
  • Analistes i auditors de seguretat informàtica
  • Enginyer d’objectes intel·ligents
  • Community Manager. Gestor de comunitats virtuals de les organitzacions
  • Expert SEO (Search Engine Optimization) i SEM (Search Engine Marketing)
  • Responsable d’e-Commerce per gestionar el comerç en línia
  • Consultor d’e-Business
  • Professional de l’assistència integral a la tercera edat
  • Enginyer de vehicles orientats a la sostenibilitat del medi ambient
  • Enginyer d’eficiència energètica
  • Experts de seguretat en Cloud Computing
  • Desenvolupador d’animació en 3D i de videojocs

Els perfils professionals emergents també provenen de sectors on s’esperen grans avenços, com el turisme cultural, la biomedicina, l’enginyeria genètica, la biotecnologia, la robòtica, l’agricultura biològica o el sector aeronàutic. Per acabar, existeix la necessitat de generar perfils amb vocació emprenedora, i facilitar l’autoocupació de cara a configurar una comunitat empresarial competitiva. Això no només depèn de polítiques, sinó també de fomentar l’esperit emprenedor en totes les fases de l’aprenentatge.

José Luis del Olmo Arriaga

Director de l’Observatori de la Demanda Universitària. Director de Postgrau i Extensió Universitària. Universitat Abat Oliba CEU


La política y las redes sociales

La presencia en la red se convierte en un camino directo de comunicación de los candidatos con los votantes, sobre todo los más jóvenes.

Barcelona. (Redacción).- De todos es sabido que tener presencia en las redes sociales es fundamental. Con las elecciones a la vuelta de la esquina, los políticos intensifican su movimiento en ellas o se abren un perfil, sobre todo en Twitter, donde el debate político es más intenso. Facebook y Twitter se convierten en un camino directo de comunicación con los votantes donde los candidatos políticos se lanzan a la actualización masiva de sus perfiles.

Pero, deben tener presente que las redes sociales son un canal para el debate, para la conversación, y que tendrán que escuchar, responder y analizar (con educación y respeto) las voces opuestas que puedan surgir a lo largo de todo el año, no sólo cuando se acercan las elecciones.

Una muestra del poder de las redes sociales en el marketing político es el éxito que tuvo la primera campaña de Obama en EEUU. Y justo ahora, el presidente de EEUU, ha batido un récord Guiness al convertirse en la persona que alcanza con más rapidez un millón de seguidores en Twitter, algo que logró en menos de cinco horas con su nueva cuenta @POTUS.

Durante estas semanas previas a las elecciones, los políticos se centran en quién tiene más followers, fans, retweets, conversaciones y debates más interesantes, pero pasadas las votaciones, muchos candidatos olvidan sus cuentas. Y aquí es donde cometen el grave error de usar las redes sociales simplemente unos días cada cuatro años.

Hace unos días estuvo por el país Katie Stanton, vicepresidenta de Global Media de Twitter e hizo algunas declaraciones sobre la relación de los políticos con Twitter, donde señaló que los políticos españoles están a la cabeza. Le resulta sorprendente cómo en España todos los candidatos están en Twitter, que hayan entendido que es una plataforma que les permite conversar con su electorado y favorece una relación diferente.

Respecto a la manera de twittear, los partidos nuevos tienden a asumir más riesgos, a compartir e interactuar más y a ser más transparentes. Tuitean de forma más frecuente. Los tradicionales suelen ser más cautos y conservadores porque, al estar en el poder, tienen más que perder.

Destacó la importancia del papel que tiene Twitter para llevar la política a una franja de edad que muchas veces no se informa por los medios tradicionales. Ayuda a que sean conscientes de los problemas y de lo que está en juego, a que conozcan a los candidatos y lo que representan. Es una herramienta fundamental para animar a votar a audiencias jóvenes, para hacerles saber que importan y que su voto cuenta.

Por eso, los políticos no sólo tienen que estar presente en las redes sociales durante el período de campaña electoral, las redes sociales van más allá. Si el candidato quiere que eso se convierta en un valor de marca para el futuro, si quiere que las redes sociales realmente le ayuden a llegar a los votantes, su perfil tendrá que mantenerse siempre activo y tendrá que seguir interactuando con sus seguidores.