Jorge Martínez-Lucena, catedrático de Medios de Comunicación de Masas y profesor en la Universitat Abat Oliba CEU y colaborador del grupo de investigación «Familia, Educación y Escuela Inclusiva» (TRIVIUM), expone en un nuevo capítulo de El Efecto Avestruz, una serie de entrevistas de la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP), las claves del mundo de los adolescentes y adultos que pueden desprenderse de la serie Euphoria, creada por Sam Levinson.
De acuerdo con Jorge Martínez-Lucena, la serie Euphoria puede ser «muy útil para que los adultos entiendan bien lo que está sucediendo en el mundo de los jóvenes». En Euphoria puede apreciarse una descripción realista del mundo adolescente y de la generación Z, especialmente influenciada por el uso de las pantallas debido a la COVID-19. «En un móvil está todo lo necesario para tener problemas de todo tipo». En este sentido, Martínez-Lucena advierte de los graves problemas de adicciones y dependencias de todo tipo, también sobre los peligros de relaciones sexuales basadas únicamente en la lógica del mero consumo.
Asimismo, el foco puede ponerse en los adultos. Según Martínez-Lucena, «son como son, tienen una herida como la que tienen, en gran medida porque no han experimentado la gratuidad del amor» y eso, «a pesar de haber sido hiperprotegidos y haber tenido todas las facilidades (…) han crecido como alguien que no importaba realmente, sino que simplemente se les pedía que cumplieran unos objetivos, es decir, eran un poco prisioneros también del deseo de los padres de construir un chico perfecto, un chico para el éxito». Además, Jorge Martínez-Lucena afirma que en Euphoria se retrata un gran problema de los adultos: «no hay adultos que te puedan decir, con su existencia, no de palabra, que la vida vale la pena ser vivida y que es una cosa buena pese al dolor y al sufrimiento». 
Puede verse la entrevista completa aquí