Las cifras de sobrepeso y obesidad infantil, que antes de la pandemia afectaba a entre un 35% y un 41% de los menores, lejos de retroceder, están creciendo de forma preocupante. La práctica de hábitos saludables relacionadas con la actividad física, que en el 2019 seguían solo un 36% de los niños y adolescentes se han reducido drásticamente, advierte Mª Ángeles Tejero, cardióloga pediátrica del hospital Reina Sofía.
Esto no solo trae graves consecuencias en la salud física de los menores, también afecta de forma psicológica debido al continuo aislamiento social en el que nos encontramos.
Por ello que cabe recordar que según la OMS, Organización Mundial de la Salud, un niño debe realizar 60 minutos diarios de actividad física moderada-vigorasa, y que dar un paseo de media hora el fin de semana no es suficiente, insiste la Doctora Tejero.
Y nos recuerda que «la obesidad en la infancia y adolescencia no es una cuestión estética sino que va a predecir la obesidad del adulto y los problemas que esta conlleva».
Ya que son muchas las enfermedades o problemas de salud que la falta de práctica deportiva pueden provocar en un menor, colesterol elevados, problemas de presión arterial, alteraciones de la articulaciones, etc.
La recomendación que nos propone la dra.Tejero es sencilla, limitar la exposición delante de una pantalla a un màximo de 2 horas diarias, y practicar una hora diaria de la actividad física que nos propone la OMS. Pero para ello los padres deben dar ejemplo, y facilitar así la creación de hábitos saludables desde la infancia.
El miedo no puede hacer descuidar la salud de nuestras hijas e hijos, debemos facilitar esta práctica deportiva, eso sí, siempre que se puedan establecer las medidas de seguridad que nos marca la pandemia.
Fuente: Diario Córdoba