Investigadores de Estados Unidos reunieron datos de 12 estudios previos tanto americanos como europeos para crear una base de datos de 1.4 millones de adultos, y llegar a la conclusión de que a mayor ejercicio, mayor beneficio, es decir, menor probabilidad de contraer enfermedades.
En este estudio se afirma que tan solo practicando deporte un par de hora a la semana, se reduce el riesgo de padecer cáncer de mama, de colon y de pulmón, que son tres de los que más afectan a al población norte americana. Por lo tanto, a mayor tiempo invertido en actividades físicas, es menor el riesgo de padecer cáncer, aparentemente sin límite.
Según el estudio, la reducción afecta a 13 tipos diferentes de cáncer, yendo desde la reducción de un 42% para el de esófago, hasta un 10% para el de mama, un 16% en el de colon y un 26% en el de pulmón, entre otros. Sin embargo, no tienen respuestas claras para la pregunta ¿por qué hacer ejercicio disminuye el riesgo de padecer cáncer?, no obstante, si existen varias teorías. Una de estas teorías es que la actividad física reduce los niveles de estrógenos, vinculado a diferentes tipos de cáncer. También se cree que las células padecen menos estrés oxidativo por lo que pueden reparar mejor el ADN dañado que podría provocar la enfermedad.
Pese a no tener una respuesta clara para el enigma, lo resultados son evidentes, por lo tanto, hacer ejercicio no solo nos hace estar más sanos física y mentalmente, si no que ayuda a prevenir enfermedades tan graves como el cáncer.
Fuente: National Cancer Institute at the National Institutes of Health