Cuidados infantiles de calidad, una cuestión urgente

En marzo de 2021, el Banco Mundial publicaba un comunicado de prensa al que los medios de comunicación quizá no dieron la importancia y la difusión necesaria.

Los efectos de la pandemia eran muy preocupantes, cuestión todavía no resuelta, y quizá por ello cuando se destacó la situación crítica en cuidados infantiles, no se consiguió atraer la suficiente atención social y mediática.

En pleno mes de noviembre de 2021, los titulares de prensa los acaparan las declaraciones y noticias de la COP 26, la conferencia de Naciones Unidas para el clima, celebrada en Glasgow que cierra sus sesiones, con declaraciones que marcan progresos, pero también muchas reservas, pues las circunstancias de los países son muy distintas.

Esta situación mediática no debe hacernos olvidar la responsabilidad creciente que las sociedades tienen sobre la educación y el cuidado de los niños.

El Banco Mundial nos recordaba en marzo pasado que “más del 40 % de toda la población infantil que no ha alcanzado la edad escolar (es decir, casi 350 millones) necesita servicios de cuidado a los que no tiene acceso. En consecuencia, demasiados niños y niñas pasan el tiempo en entornos inseguros y poco estimulantes. La pandemia de COVID-19 (coronavirus) ha puesto aún más de manifiesto las deficiencias en la provisión de servicios de cuidado infantil y la vulnerabilidad del sector en todo el mundo” (Banco Mundial, 2021).

Se trata de un problema importante y que requiere urgencia que no aparece en la agenda de los gobernantes con la misma insistencia, por ejemplo, que la que estos días vemos con relación a la citada COP 26 y su traslación a los medios de comunicación.

Las cuestiones vinculadas al cambio climático y su evolución hacia el fin de siglo XXI son importantes y requieren atención, pero la responsabilidad sobre 350 millones de niños en todo el mundo no lo es menos.

La inversión en servicios de cuidado infantil asequibles y de calidad es fundamental para desbloquear las vías de salida de la pobreza, contribuir a que todas las personas alcancen su potencial y aumentar la equidad, todas ellas piedras angulares del crecimiento económico y la productividad de los países.

Jaime Saavedra, director del Departamento de Prácticas Mundiales de Educación del Banco Mundial lo expresó de forma muy clara: “Los primeros cinco años en la vida de un niño son un período de rápido desarrollo del cerebroProporcionar a la población infantil un entorno seguro y estimulante durante esta etapa tiene enormes beneficios y permite que las inversiones posteriores en educación sean mucho más eficaces” (Banco Mundial 2021).

 

Junto a las cuestiones geopolíticas y a las relacionadas con el medioambiente, los países deberían actuar sobre una cuestión de urgencia radical, como es el cuidado de los niños y la protección a la familia, para conseguir una sociedad realmente sostenible y comprometida con un mundo mejor, en el bien de todos.

En los últimos años, cada vez de forma más decidida, las organizaciones, empresas y gobiernos adoptan los Objetivos de Desarrollo Sostenible como herramienta que combinan con sus definiciones estratégicas. La educación de calidad (Objetivo número 4) forma parte de los aspectos multidimensionales que debemos medir para entender los términos de pobreza y riqueza real, tal como nos recuerda Atkinson (2019), en su obra dedicada a la medición de la pobreza alrededor del mundo.

Los 350 millones de niños que precisan cuidados que les acerquen en condiciones óptimas a la educación, claman por una actuación decidida y urgente que los medios de comunicación no reflejan de forma suficiente.

 

Referencias:

Atkinson, A. B. (2019) Measuring Poverty Around the Word. Princeton University Press

Banco Mundial (2021) Casi 350 millones de niños y niñas carecen de cuidado infantil de calidad en el mundo. https://www.bancomundial.org/es/news/press-release

 

Cátedra UNESCO Universidad Abat Oliba CEU

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *