El 14 de mayo pasado el Instituto de la Empresa Familiar celebró en Madrid su asamblea anual correspondiente a 2015.
La entidad está formada por un centenar de firmas, todas ellas de volumen y dimensión muy significativa. De la sesión se pudo extraer una sensación generalizada de moderado optimismo ante el desarrollo de la situación económica a corto y medio plazo.
Javier Moll, actual presidente del Instituto destacó que: “La apuesta de las principales empresas familiares españolas por el presente y el futuro de la economía de nuestro país sigue vigente”. También puso de manifiesto los costes que en términos de credibilidad en las instituciones ha tenido la reciente crisis económica.
Los socios del IEF perciben una cierta mejora del clima económico y el 76% de ellos prevé aumentar ventas, el 88% mantendrá o incrementará plantilla y el 76% elevará su inversión en España.
El párrafo anterior refleja un verdadero cambio de situación, algo que no ocurría en los años anteriores consecuencia de las dificultades derivadas de la crisis financiera y de los programas gubernamentales de ajuste.
Javier Moll también destacó “que la recesión económica ha contribuido a deteriorar la percepción que la sociedad tiene de la mayoría de las instituciones del país, incluidas las empresas y la recuperación de la valoración positiva pasa por un fuerte compromiso con el empleo”. También recordó que “como prueba de ese compromiso, por parte de la empresa familiar, sólo el centenar de empresas que componen el IEF dan empleo a 1.250.000 personas.
También de la web del IEF son destacables las opiniones sobre la importancia de la empresa familiar que expresó la canciller alemana Angela Merkel en Berlín, el año pasado, durante el Congreso del European Family Businesses: “la empresa familiar va realmente por delante de lo que estipula nuestra economía social de mercado como modelo económico y social, al combinar la libertad y la responsabilidad como valores fundamentales”.
En la edición de la Asamblea del IEF de este año tuvo un papel destacado José Antonio Álvarez, consejero delegado del Banco Santander quien trató aspectos estratégicos de la actividad de la banca, señalando que “el escenario global importa mucho y cada vez más. El próximo competidor probablemente no está cerca de nosotros. Puede estar en cualquier sitio. Lo podemos conocer o no. Hace varias décadas el tiempo de acceso era muy largo, pero ahora, es relativamente corto”.
Álvarez abogó “por la diversificación y por la necesidad de ganar mercados, pues el doméstico no es suficiente”.
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Nota: El profesor Juan Corona de la Universidad Abat Oliba CEU, es el director general del Instituto de la Empresa Familiar.
Joaquín Solana Oliver
(Economista)