Continuación de una entrada anterior en este blog, y siguiendo a Peters, Smith y Thomas (2018) se destacan a continuación, lo que estos autores definen como los grandes dilemas que debe tener en cuenta la educación directiva en nuestro tiempo
La educación para el management al ser una materia multidisciplinar se halla sometida a influencias muy diversas, desde las que proceden del campo académico hasta las que son consecuencia de modas o simplificaciones de una realidad compleja.
Si atendemos a la enumeración de los autores citados, se plantean siete dilemas en la educación para la dirección (Peters, Smith, Thomas, 2018, pp. 141-144)
- Lo individual y la organización: La necesidad de, no solamente ofrecer en los programas conocimientos sobre el cambio en las organizaciones, sino también sobre los cambios necesarios en la esfera individual
- Lo cognitivo y la conducta: Los programas educativos suelen basarse en conocimientos técnicos (que son imprescindibles) pero no se trabajan suficientemente las habilidades, las que suelen definirse como “soft skills” que a lo largo de la vida de la persona directiva son las más difíciles.
- Acción y reflexión: Aprender a relacionar la reflexión, la teoría y lo abstracto con la acción.
- Teoría y práctica: Las personas que ocupan cargos directivos suelen dar opiniones que sitúan a la teoría como algo alejado de la práctica sin darse cuenta de que en cada acción que desarrollan están tomando como base a teorías existentes, muchas veces se hace de forma inconsciente.
- Enseñar y facilitar: Debe valorarse al máximo la función de enseñar, también a lo largo del desarrollo de la profesión, no solamente en la Universidad, o en las Business Schools, ello quiere decir promover acciones, animar, estimular, inspirar, facilitar la innovación, etc. en las empresas.
- Experiencias emocionales e intelectuales: Potenciar el estudio y después el trabajo, fuera de las llamadas “zonas de confort” creando un clima que prepare a los directivos del futuro a gestionar situaciones inesperadas, gestionar el propio estrés, derivado de un mundo lleno de situaciones ambiguas.
- Aprendizaje formal e informal: Es necesario combinar la enseñanza formal, los programas formales, tanto en el estudio como en el desarrollo de la actividad profesional, junto a una dinámica informal enriquecedora que permita la creación de conocimiento, casi de forma artesanal, ligada a la vida real.
Lo anterior, de forma muy simplificada resume una serie de retos a los que debe enfrentarse toda profesión directiva en nuestro tiempo, desde la etapa formativa —que debe extenderse durante toda la vida, asumiendo la normalidad del “lifelong learning”— hasta el día a día en todo tipo de organizaciones y empresas.
Referencias:
Peters, K.; Smith, R.; Thomas, H. (2018) Rethinking the Business Models of Business Schools: A Critical Review and Change Agenda for the Future. Emerald Publishing
Departamento de Empresa y Economía
Universitat Abat Oliba CEU